Los
13 o 14 mandamientos
Andrés
Hoyos
Uno.
No escribirás decálogos de diez mandamientos ni obedecerás la
aburrida ley de los números redondos.
Dos.
Amarás la vida por encima de todas las cosas, aunque solo sea porque
los muertos no aman a nadie, y no la sacrificarás en altares
presuntuosos, como religiones, patrias, ideologías políticas o
nihilismos extremos.
Tres.
No jurarás en vano el santo nombre de Johann Sebastian Bach.
Cuatro.
No intervendrás en peleas de padre y madre.
Cinco.
No serás supersticioso porque eso trae mala suerte.
Seis.
No te irás por las ramas cuando puedas irte por el suelo.
Siete.
No obedecerás al personaje mudo que te sale por las mañanas en el
espejo.
Ocho.
Preferirás las excepciones a las reglas, así esta regla también
admita excepciones.
Nueve.
Cometerás actos ocasionales contra la pureza, condición que los
humanos perdemos por lo general a los dieciocho años.
Diez.
No cometerás traición.
Once.
Pedirás vacaciones con frecuencia.
Doce.
Usarás pronombres masculinos para referirte al indefinido prójimo y
no “colocarás”, sino que “pondrás”, no “escucharás”,
sino que “oirás”.
Trece.
Pedirás perdón aun cuando el mandamiento de vivir poniendo la otra
mejilla caducó hace siglos.
Catorce.
Serás paradójico, contradictorio, antinómico, incongruente,
incompatible, refractario, inconsecuente y malpensante cuando la vida
te exija esas formas de indisciplina. También podrás arrepentirte
en cada caso.
Aparte tomado de:
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