ANTOLOGIA DE DECALOGOS LITERARIOS

"Los Diez Mandamientos, considerados útiles reglas morales para vivir en sociedad, tienen un excelente uso literario. El escritor, al contar sus historias, debería hacer que sus personajes violen constantemente estos mandamientos, en conjunto o por partes. Mientras alguien robe, mate, mienta, fornique, blasfeme o desee a la mujer del prójimo tendremos un conflicto y en consecuencia una historia que contar. Por el contrario, si sus personajes se portan bien, no sucederá nada: todo será aburridísimo."
Fernando Ampuero


Uno de los más interesantes y que recoge más sabiduría, tiene un solo postulado. Se lo leí a Alejandro Quintana y dice:

"Porque en realidad ya se ha contado todo; lo novedoso es contarlo de forma interesante".

Es muy común que los escritores, cuando gozan de cierto reconocimiento, decidan organizar sus ideas en forma de recomendaciones que suelen enumerar en listas, generalmente en forma de decálogos, muy a manera de configurar una suerte de "Tablas de la Ley"o de "Diez Mandamientos" , en los que pontifican,-con razón o sin ella, en concordancia con su prestigio y sabiduría o apenas haciendo gala de una vana pretensión un tanto ególatra- sobre sus verdades decantadas acerca del oficio de escribir.

Unos condensan verdaderas sentencias, otras son apenas esbozos que naufragan en su propia babosería; unos son un compendio de ingenio, otros verdaderos destellos de humor, mientras algunos apenas sí resbalan como peligroso chascarrillo en el reino del lugar común.

De todas maneras, en esta página recopilamos algunos de ellos, como elemento para el análisis y estudio de los interesados en el ejercicio de escribir. Muy recomendado para aprendices y aficionados, para lectores desprevenidos, para alumnos de talleres literarios y para todos los que se deleitan del bello arte de la Literatura.

Al final citamos los más ingeniosos, clásicos, reconocidos o polémicos.

Lo que comenzó como un divertimento, pasó a ser una disciplina que permite enriquecer la teoría de la creación literaria, en la voz de los maestros. La idea original parte de la página www.emiliorestrepo.blogspot.com
Comentarios y aportes, favor remitirlos a emiliorestrepo@gmail.com

jueves, 14 de marzo de 2024

DECÁLOGO DE JORDI SIERRA I FABRA SOBRE LOS LIBROS Y LA LECTURA

 

JORDI SIERRA I FABRA nació en Barcelona el 26 de julio de 1947.


























Tuvo sus primeras incursiones profesionales en la música, otra de sus grandes pasiones. Fue uno de los fundadores del programa de la Cadena Ser "El Gran Musical", y en 1970 abandonó los estudios para convertirse en comentarista musical, lo que le permitió viajar por todo el mundo con grupos y artistas del momento para cubrir sus actuaciones y escribir reportajes.

 

En 1981 logró el Premio Gran Angular de literatura juvenil por El cazador, y repitió dos años más tarde con ...En un lugar llamado tierra. Volvió a hacerse con él en 1990 por El último set. A lo largo de su carrera ha obtenido cuantiosos galardones, como el Premio El Barco de Vapor de literatura infantil (2010), el Ateneo de Sevilla en 1979, Premio Edebé de Literatura Infantil (1993) y el de Literatura Juvenil (2006), el Premio A la Orilla del Viento de México (1999) y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil en 2007 y el Premio Cervantes Chico en 2011, entre otros muchos.

 

Ha impartido numerosas charlas sobre literatura infantil y juvenil, ocupación que sigue desarrollando aún hoy en centros de enseñanzas, bibliotecas y otras instituciones de España e Hispanoamérica. Cuenta con la Fundación Jordi Sierra i Fabra, creada en pos del fomento de la lectura y de la escritura entre los más jóvenes, la cual, desde 2006, entrega el premio literario que lleva su nombre para jóvenes escritores.

 

Sus obras se sumaron una tras otra, al igual que los reconocimientos que ha cosechado a lo largo de su carrera. Algunos de sus libros han sido adaptados al teatro y al cine, y es uno de los autores más vendidos en nuestro idioma. Entre sus trabajos también encontramos numerosas biografías de artistas internacionales de rock, como John Lennon, Michael Jackson, Bob Dylan, The Beatles o Rolling Stones.

 

De su libro de escritura creativa, LA PAGINA ESCRITA tomamos el siguiente decálogo:

 

Un buen libro puede cambiar la vida de las personas.

Esta es la razón de que un buen libro pueda cambiar la vida de las personas. A todos nos ha marcado una obra a lo largo de nuestra vida, y por lo general esto sucede, y con plenitud de fuerza, en la adolescencia. En el otro extremo, leemos por ocio, por entretenimiento y evasión, para vivir aventuras, ser astronautas o piratas, excelsos amantes o viajeros apasionados. Necesitamos nutrir el espíritu y reforzar el alma, o puede que sea al revés. Da lo mismo. La persona que no lee está muerta en vida, ausente y coja, perdida de referencias. Todos necesitamos muletas para movernos por la vida, a la edad que sea. Leer es la mejor de ellas. El invisible poder de la palabra escrita es una luz sólida que nos ilumina y nos da fuerzas.

Previo a escribir: leer.

En una ocasión, en una conferencia, me atreví a realizar un decálogo propio en torno a los libros y la lectura. Creo que encaja aquí, como parte de esta teorización sobre la singularidad de la palabra escrita, el placer de leer como antesala de la virtud de escribir:

DECÁLOGO DE JORDI SIERRA I FABRA SOBRE LOS LIBROS Y LA LECTURA

1.     El libro, lo mismo que el arte en general, ha de estar presente de forma natural y habitual en la vida de los jóvenes.

2.      El libro no es un patrimonio exclusivamente cultural, sino un elemento más de entretenimiento en un mundo abierto cada día a más opciones de ocio global.

3.      Un libro es como un disco, una película, un vídeo o un juego: pura evasión.

4.      La biblioteca es el mayor salón de juegos (gratuito) del mundo, y hay siempre una más o menos cerca de ti.

5.      Leer nos hace independientes, nos da personalidad, poder, fuerza, ideas propias, nos diferencia de los demás.

6.      Leer es la principal llave de esa puerta llamada libertad.

7.      Leer es la única droga que de verdad nos abre la mente, nos da luz y nos cambia.

8.      Al leer, al sentir, recordamos que estamos vivos, y que esto es un privilegio.

9.     Cuando el mundo intenta darnos alcance y asquearnos, leer es lo único que nos devuelve a nuestra condición humana.

10.                        Leer es como hacer el amor: estás tú y el libro, solos, compartiéndolo todo.

Si leer nos hace formar parte de una realidad global, en la misma medida las personas que escriben necesitan hacerlo para sentirse vivas.

Así pues, ¿por qué escribir? ¿Para vivir? ¿Para comunicarnos? ¿Para saber que existimos?

Haría falta un libro entero para hablar de ello, y no hay tiempo ni espacio para tanta elucubración, sobre todo si el que escribe la respuesta es un loco, un apasionado, un enfermo de la escritura, como es mi caso. Una de mis frases más conocidas dice: «Escribir es el orgasmo continuo», y con esto creo que todo queda dicho.

Hasta 2006 he escrito más de trescientos libros, de todos los géneros(para 2024 van más de 550, el hombre no para nunca), y he ganado premios literarios en muchos de ellos, desde la ciencia ficción al thriller político y desde el



 

 

 

 

 

 

sábado, 6 de enero de 2024

Apuntes para una teoría del cuento - Julio César Londoño

Apuntes para una teoría del cuento

Julio César Londoño
05 de enero de 2024 - 09:05 p. m.


Julio César Londoño

Imagen tomada del Twitter del autor

https://twitter.com/julioclondono







Tomado de: https://www.elespectador.com/opinion/columnistas/julio-cesar-londono/apuntes-para-una-teoria-del-cuento/

El cuento admite varias definiciones. La definición camorrera sostiene que un cuento es una novela libre de ripios. Con argentino aplomo, Cortázar dijo que el cuento era una narración de 20 páginas máximo. Poe lo practicó como una máquina de horrores cuyo eje es la tensión. Si sumamos estas definiciones concluimos que el cuento es un relato breve cuyo protagonista es el argumento y su alma es la tensión.

 

Nota. No existe el género relato. Relato significa relación de sucesos. Es una etiqueta que abarca la novela, el cuento, el drama, la cuentería, la anécdota y el chisme.

 

Los maestros advierten que el cuento puede partir de una anécdota pero tiene la obligación de editarla, complicarla y llevarla a las alturas del arte y la ficción.

Ejemplo de anécdota: un padre abofetea a su hijo de siete años delante de sus amigos. El niño llora y piensa: voy a matar a este viejo marica. Luego el padre se arrepiente, lo abraza, le pide perdón, el niño sonríe y lo perdona. Fin de la anécdota.

 

Ejemplo de cuento. Un padre le pega a su hijo. El hijo llora y se promete: lo mataré. Pero luego se reconcilian. Se abrazan. El hijo sonríe amorosamente y piensa: voy a matar a este viejo marica. Lo envenenaré. En este momento el relato trasciende la anécdota y alcanza las alturas del cuento.

 

Es difícil distinguir un cuento realista de una crónica porque solo los diferencia el hecho de que “la crónica es un cuento que es verdad” (GGM). Pero los buenos lectores intuyen la diferencia. La huelen en la sonrisa de ese niño súbitamente asesino, o en un guiño intertextual, o en el filo de la prosa, o en la aparición de un narrador omnisciente, ese superojo que es patrimonio exclusivo de la ficción.

 También es moderno el concepto de “literatura fantástica”. El mundo medieval era tan delirante que nadie pensaba que las brujas, los dioses, los magos y los dragones fueran criaturas fantásticas. Los dioses y los dragones pertenecían al más rancio costumbrismo. Es entre los siglos XV y XVI, cuando los dioses pierden terreno y el escepticismo empieza a sospechar de todo, que se acuña la expresión “literatura fantástica”.

 

El deber de la crónica es la verdad. Al cuento solo le pedimos verosimilitud. Para gozar y sufrir las mentiras de la ficción, exigimos que sean creíbles, verosímiles. Para lograrlo, el cuentista echa mano de un testigo serio: un escéptico, un gato, un espejo. Supongamos que el autor quiere convencernos de que hay un fantasma en la alcoba del protagonista. Entonces recurre a la declaración de un testigo escéptico, uno que no cree en fantasmas, como en Otra vuelta de tuerca de Henry James. O nos muestra un gato erizado, prueba patente de que en la habitación hay una potencia sobrenatural, una entidad que solo el gato puede sentir. O recurre a la prueba del espejo: todos vemos al conde Drácula pero los espejos no lo reflejan, y esto es suficiente para crisparnos el alma. Esa no-imagen es más terrible que sus colmillos, su lujuria y su sed roja.

 

Los enemigos del cuento son la cantaleta moral, la corrección política, los excesos líricos y la erudición. También es grave subestimar la inteligencia y la credulidad del lector.

 

P. S. Desde el último sábado de enero estudiaremos el cuento y otros géneros (la crónica, la crítica literaria, el ensayo de divulgación científica y la poesía) en mi taller virtual de escritura, un foro que inventé para descubrir con los alumnos las posibilidades de ese viejo y querido instrumento, la lengua española.

Mas articulos del autor J.C.Londoño:

https://decalogosliterarios.blogspot.com/search/label/Julio%20C%C3%A9sar%20Londo%C3%B1o



domingo, 9 de abril de 2023

DECALOGO PARA EL ESCRITOR DE GÉNERO NEGRO LATINOAMERICANO

 

DECALOGO PARA EL ESCRITOR DE GÉNERO NEGRO LATINOAMERICANO

Autor: Emilio Alberto Restrepo


















Libros del personaje JOAQUIN TORNADO, DETECTIVE, del autor

http://joaquin-tornado-detective.blogspot.com/


Con alguna frecuencia me preguntan en charlas, talleres y conferencias por mi experiencia como escritor de género negro. Me piden consejos y sugerencias para la creación de personajes y atmosferas que ambienten de manera eficaz las historias. Pues bien, aprovechando que en el último mes se dio la coincidencia de que ocurriera en forma reiterada, aproveché para resumir una especie de decálogo, con los conceptos que aplico para la estructuración de mis novelas. Hago especial énfasis en la condición de latinoamericano, sin negar mi gusto personal por la literatura de otros continentes, siempre guardando el respeto por los referentes, los grandes maestros y los personaje icónicos.

1. Investigar y conocer bien el contexto social, económico, histórico y político de la región (con énfasis en La Ciudad) y utilizarlo con los personajes, para enriquecer las historias y hacer que reflejen las características propias de la región y sus desafíos.


2. En cuanto a los personajes: Crear personajes complejos y realistas, que reflejen la diversidad y complejidad de la sociedad latinoamericana. Crear un personaje vívido y multidimensional, que tenga una personalidad definida y única, y que esté bien desarrollado tanto física como psicológicamente. Darles a los personajes una historia de vida interesante y coherente, que explique sus motivaciones y objetivos, y que sea relevante para la trama. Especial énfasis a los antagonistas. Mientras mejor el malo, mejor el conflicto y mejor la historia.

 

3.Utilizar el lenguaje de manera efectiva y evocadora para crear atmósferas y ambientes que reflejen el mundo de tus personajes. Diálogos contundentes, cada personaje con su propia identidad de lenguaje, descripciones económicas y precisas.


4.Tratar temas relevantes y universales como la violencia, la corrupción, la discriminación y la desigualdad, pero haciéndolo desde una perspectiva local y única. Tratar los temas difíciles con respeto y sensibilidad, evitando caer en el sensacionalismo o la trivialización.


5.En el género, la tensión es fundamental, hay que dosificar la información, creando tramas intrincadas e ingeniosas que mantengan al lector interesado y lo sorprendan en cada vuelta de página, que desafíe al personaje a usar su inteligencia y confronte al lector con sus habilidades para resolver el caso (y tratar de que no lo logre, sin sentirse engañado).


6. Utilizar la investigación y la resolución de crímenes como una herramienta para explorar los aspectos más oscuros de la condición humana, sin perder de vista la posibilidad de redención y justicia. Tratar de no pontificar, no ser pedagógico mi moralista, no usar moralejas. La reflexión sobre la ética y lo social se desliza con sutileza, nunca de manera pegajosa, el lector no está buscando consejos; la reflexión debe estar implícita, sin que sea una declaración explicita. Se infiere, se huele, pero no se evidencian de manera confrontadora. EJ: no se dice que la política es sucia, se muestra un político abyecto y corrupto a través de sus hechos.


7. Experimentar con técnicas literarias y narrativas para crear una obra original y fresca que destaque en un mercado saturado, y que demuestre la calidad y potencial de tu personaje de detective (o villano) latinoamericano.


8. Conectar con los lectores a través de las redes sociales y otros canales de comunicación, creando una comunidad de seguidores fieles.


9. Leer y estudiar a los grandes maestros del género negro, tanto latinoamericanos como internacionales, para aprender de su técnica y estilo, y así poder llevar tus propias historias a nuevos niveles de excelencia.


10. Conectar con los lectores a través de los rasgos y personalidad del personaje, creando una conexión emocional que les haga sentir como si lo conocieran, que lo sientan como propio. Tratar de no repetir los estereotipos norteamericanos. No son iguales las mujeres fatales locales que las gringas, ni el modelo de un policía sueco es aplicable a un investigador latino. El campo y las ciudades son distintas en cada continente, los insultos, los piropos, los modismos y expresiones locales son difíciles de trasladar.

 

Otras propuestas pedagógicas (DECALOGOS DE TALLER) que propongo para complementar:

decálogo del villano perfecto en literatura

https://decalogosliterarios.blogspot.com/2023/01/decalogos-de-taller-literario-propuesta_25.html


decálogo del escritor urbano:

https://decalogosliterarios.blogspot.com/2023/01/decalogos-de-taller-literario-propuesta.html

 

 decálogo para el diseño de un adecuado conflicto: 

https://decalogosliterarios.blogspot.com/2023/01/decalogos-de-taller-literario-propuesta_19.html

 

sábado, 11 de febrero de 2023

DECÁLOGO DEL ESCRITOR FANTASMA

 

LAS 10 CARACTERÍSTICAS DE UN BUEN ESCRITOR FANTASMA (NEGRO LITERARIO) PARA GANARSE EL RESPETO Y HACER LIBROS DE CALIDAD




Cada vez es mas común que muchos escritores alquilen sus plumas en beneficio de clientes que los contratan para escribir sus libros, bien sea por edad, por incapacidad literaria, por pereza, facilismo o procrastinación.

Lo cierto es que esta figura existe desde hace siglos y cumple una función laboral o social, para hacer los textos que otros quieren y, por alguna razón, no pueden hacer. Lo hacen magnates, mafiosos o delincuentes, políticos, cantantes, deportistas, celebridades, en general, profesionales retirados con ego y plata que sienten que tienen algo que contar y no saben cómo hacerlo. Es en serio y no hay que ir tan lejos. Tampoco hay que avergonzarse de ello.

En nuestro entorno conocemos a varios escritores calidosos que le escriben los libros por encargo y de manera anónima a otros que no se atreven o no son capaces de llevarlos a cabo. Esto tiene algunas características cualitativas que es importante tener en cuenta:

1.     Conocimiento profundo de la literatura: Un buen escritor fantasma debe tener un amplio conocimiento de la literatura y de los diferentes géneros literarios, para poder dar vida a una obra de calidad.

 

2.     Habilidades de escritura sólidas: Un buen escritor fantasma debe tener habilidades sólidas de escritura, incluyendo un buen manejo del lenguaje, la gramática y la estructura de una obra literaria.

 

3.     Capacidad de adaptación: Un buen escritor fantasma debe ser capaz de adaptarse a diferentes estilos y voces de escritura, y ser capaz de trabajar con diferentes géneros literarios.

 

4.     Habilidades de investigación: Un buen escritor fantasma debe ser capaz de investigar y recopilar información relevante para un proyecto, y utilizarla de manera efectiva en su escritura.

 

5.     Habilidades de edición: Un buen escritor fantasma debe ser capaz de editar y corregir su propio trabajo, y trabajar en colaboración con el autor para asegurarse de que la obra cumpla con sus expectativas. Debe documentarse en el tema tratado, grabar, revisar archivos, preguntar y volver a interrogar. Hablar con terceros, amigos y contradictores. (siempre con límites y respeto).

 

6.     Comunicación efectiva: Un buen escritor fantasma debe ser capaz de comunicarse de manera efectiva con su cliente o autor, y ser capaz de comprender y cumplir con sus requisitos y expectativas. Personificar al cliente hasta en punto de captar su esencia para dejarse permear de  su estilo y hacer un texto que refleje la personalidad del contratista, más que la suya propia. Y entender muy claro las diferencias entre estas.

 










7.  Asuntos éticos: En general, es importante que los escritores fantasma sigan prácticas éticas y profesionales para garantizar la calidad del trabajo y protegerse de cualquier problema legal.

 

 a) Discreción y confidencialidad. Un buen escritor fantasma debe ser discreto y mantener la confidencialidad de sus proyectos y relaciones con sus clientes; debe respetar la privacidad de sus clientes y no revelar información confidencial o identificable sobre ellos.

b) Conocer y respetar las leyes de derechos de autor: El escritor fantasma debe estar al tanto de las leyes y regulaciones que protegen los derechos de autor y asegurarse de que no se violen.

c) No plagiar: Es fundamental que el escritor fantasma no copie texto de otras fuentes sin permiso o sin dar crédito a los autores originales.

d) Claridad: debe Ser transparente sobre el proceso de escritura, claro sobre su rol en el proyecto para el que fue contratado y no debe  hacer afirmaciones falsas o engañosas sobre su participación. Es claro que su cliente no quiere que se traspasen estas líneas.

e) Investigación: debe asegurarse de que la información incluida en el libro sea precisa y ética, y evitar cualquier forma de falsificación o manipulación de información.

 

8.     Flexibilidad: Un buen escritor fantasma debe ser flexible y dispuesto a trabajar con diferentes autores y proyectos, y ser capaz de ajustarse a diferentes plazos y requisitos. Pasa sin problemas de un ingeniero a un mafioso, de un arzobispo a un poeta o a una estrella emergente del futbol que triunfa en Europa.

 

9.     Pasión por la escritura: Un buen escritor fantasma debe tener una pasión sincera por la escritura y el arte de contar historias, y debe estar comprometido con la creación de obras literarias de calidad. Se debe comprometer a ser responsable de la excelencia del trabajo, garantizando la calidad de la obra terminal y estar dispuesto a dar la cara por  cualquier error o incongruencia. Esto incluye ser confiable y respetar los plazos de entrega acordados con el cliente.

 

10.Profesionalismo: Por último, un buen escritor fantasma debe ser profesional en todo momento, y trabajar con integridad y ética en todas sus relaciones y proyectos literarios. Debe trabajar dentro de las especificaciones del cliente, siguiendo las instrucciones proporcionadas por aquel para producir un trabajo de calidad. No debe difamar a nadie ni aún bajo presión  y  respetar las leyes y regulaciones que prohíben la discriminación,  evitando cualquier tipo de contenido ofensivo o dañino, calumnias incluidas, o distorsión del buen nombre de terceros  y respetar la reputación de personas al margen.