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sábado, 27 de octubre de 2018

Una recopilación de expresiones de Woody Allen


Una recopilación de expresiones de Woody Allen, creador de frases lapidarias



Nadie como Woody Allen para elaborar frases contundentes que se han vuelto parte de la cultura popular.

Como es bien sabido, Allen es un director, actor, escritor, músico y humorista estadounidense, considerado como uno de los grandes directores del cine actual, con una amplia trayectoria en la que ha sido ganador del premio Óscar en cuatro ocasiones. Como peculiaridad de su compromiso con el cine, rueda una película por año, lo que le ha llevado a tener una amplia filmografía. Entre sus mejores filmes podemos encontrar la aclamada Annie Hall, Manhattan o Match point, entre otras. En esta colección hemos recopilado las mejores frases de Woody Allen, un auténtico genio del sarcasmo.

El cine de Woody Allen se caracteriza por su fuerte estilo discursivo con unos diálogos filosóficos que dan lugar a una visión del mundo un tanto pesimista y una percepción cínica del individuo por naturaleza. El humor negro y el sarcasmo están presente en la mayoría de sus obras y a través de ellos conduce temas como el amor, el sexo o la identidad. Influenciado por autores como Ingmar Bergman y comediantes como Groucho Marx, Woody Allen ha hecho historia en el mundo del cine creando un estilo propio que a su vez ha influido a muchos otros autores. 

Con el fin de repasar sus grandes citas a lo largo de su carrera, los dejamos con esta selección de las mejores frases de Woody Allen, tomadas de sus películas, de sus apuntes, libros y entrevistas

1. La diferencia entre la comedia y la tragedia es que en la comedia sus personajes encuentran la forma de sobreponerse a la tragedia.

2. El dinero no da la felicidad, pero procura una sensación tan parecida, que necesita un especialista muy avanzado para verificar la diferencia.


3. El sexo alivia la tensión. El amor la aumenta.

4. La vida es un proyecto estúpido y sin ningún tipo de sentido. La única manera de sobrevivir es contarse mentiras.

5. ¿Por qué no dejo de destrozar mi vida buscando respuestas que jamás voy a encontrar, y me dedico a disfrutarla mientras dure?

6. No le temo a la muerte, sólo que no me gustaría estar allí cuando suceda.

7. Mi forma de bromear es decir la verdad. Es la broma más divertida.

8. Si no te equivocas de vez en cuando, es que no lo intentas.

9. Sigo preguntándome si hay vida después de la muerte. Y si la hay, ¿Le cambiarán a uno un billete de veinte pavos?

10. Yo me crié en la confesión israelita, pero al hacerme adulto me convertí al narcisismo.

11. El miedo es mi compañero más fiel, jamás me ha engañado para irse con otro.

12. Sólo existen dos cosas importantes en la vida. La primera es el sexo y la segunda no me acuerdo.

13. La verdad es un gran misterio, ya que pocos la conocen, es por eso que resulta un chiste cada vez que se escucha.

14. Soy lo suficientemente feo y lo suficientemente bajo como para triunfar por mí mismo.

15. Si los seres humanos tuviésemos dos cerebros, seguro que haríamos el doble de tonterías.

16. Y mis padres por fin se dan cuenta de que he sido secuestrado y se ponen en acción rápidamente: alquilan mi habitación.

17. No quiero alcanzar la inmortalidad mediante mi trabajo, sino simplemente no muriendo.

18. Disfruta el día hasta que un imbécil te lo arruine.

19. En mi casa mando yo; mi mujer simplemente toma las decisiones.

20. De pequeño quise tener un perro, pero mis padres eran pobres y sólo pudieron comprarme una hormiga.

21. Le quiero como a un hermano: como Caín a Abel.

22. Dios ha muerto, Nietzsche ha muerto y yo no gozo de buena salud.

23. El dinero es mejor que la pobreza, aun cuando sólo sea por razones financieras.

24. La última vez que estuve dentro de una mujer fue cuando visité la estatua de la Libertad.

25. El noventa por ciento del éxito se basa simplemente en insistir.

26. Odio la realidad, pero es el único sitio donde se puede comer un buen filete.

27. Si Dios tan sólo me hiciera una simple señal, como hacer un ingreso a mi nombre en un banco.

28. Se suicidó, era el mayor intelectual que he conocido, y dejó una nota que decía: salgo por la ventana.

29. El amor es la respuesta, pero mientras usted la espera, el sexo le plantea unas cuantas preguntas.

30. La única manera de ser feliz es que te guste sufrir.

31. Vaya, si me muero mientras hacemos algo dígale al embalsamador que conserve la sonrisa de felicidad de mi cara.

32. El sexo sólo es sucio si se hace bien.

33. Sentirse culpable es importante. Yo me siento culpable todo el tiempo y nunca he hecho nada.

34. Cómo quieres que te olvide si cuando comienzo a olvidarte me olvido de olvidarte y comienzo a recordarte.

35. Si Dios ama a los pobres, ¿cómo sería si los odiara?

36. Sólo el arte es controlable. El arte y la masturbación. Dos campos en los que soy un experto.

37. No creo en una vida más allá, pero, por si acaso, me he cambiado de ropa interior.

38. La gente debería aparearse para siempre como los pingüinos o como los católicos.

39. No confundas el amor de tu vida, con el sexo de tu vida.

40. Lo mejor de la masturbación es el final: los cariñitos.

41. Para ti, soy ateo. Para Dios, la fiel oposición.

42. La diferencia entre la muerte y el sexo es que la muerte es algo que puede hacer uno solo y sin que nadie se ría después de ti.

43. Creo que el cerebro es el más sobrevalorado de los órganos.

44. De las debilidades humanas la obsesión es la más peligrosa, y la más tonta.

46. La fuerza de tus pensamientos y el reflejo de tus acciones son la firma que dejas en este mundo.

47. No quiero mudarme a una ciudad cuya única ventaja cultural es poder girar a la derecha con el semáforo en rojo.

48. Mis padres no solían pegarme; lo hicieron sólo una vez: empezaron en Febrero de 1940 y terminaron en Mayo del 43.

49. No te metas con la masturbación. Es tener sexo con alguien a quien amo.

50. Cuando era alumno, me echaron del colegio por copiar en la prueba de Metafísica. Miré en el alma de mi compañero de pupitre.

51. En mi familia nunca se ha suicidado nadie, no era una alternativa para los de clase media. Mi madre estaba demasiado ocupada en la cocina matando el sabor del pollo como para pensar en pegarse un tiro.

52. Tomé un curso de lectura rápida y fui capaz de leerme ‘La guerra y la paz’ en veinte minutos. Creo que decía algo de Rusia.

53. Antes, por cinco marcos, el mismo Freud te trataba. Por diez marcos, te trataba y te planchaba los pantalones. Por quince, Freud permitía que tú le trataras a él, y eso incluía una invitación a comer.

54. Es un chico estupendo y un magnífico doctor. Nunca perdió un paciente. Dejó preñadas a dos de ellas, pero nunca perdió ninguno.

55. Puedes pedir a Dios por la ayuda que necesitas, pero mejor trae las herramientas porque tu tienes que hacer el trabajo.

56. El mundo del espectáculo es una jungla, es peor que una jungla: en lugar de devorarse, dejan de llamarse por teléfono.

57. La jubilación es para la gente que se ha pasado toda una vida odiando lo que hacía.

58. Vamos, confiésate una vez más. Es gratis.

59. Soy una persona de vida y costumbres sanas. No fumo, no bebo y jamás forzaría sexualmente a una mujer ciega.

60. Hay que trabajar ocho horas y dormir ocho horas, pero no las mismas.

61. La cuestión es: ¿he aprendido algo sobre la vida? Sólo esto: los seres humanos están divididos entre mente y cuerpo. La mente abarca todas las aspiraciones nobles, como la poesía y la filosofía, pero el cuerpo se lleva toda la diversión.

62. No sólo de pan vive el hombre. De vez en cuando, también necesita un trago.

63. Algunos matrimonios acaban bien; otros duran toda la vida.

64. Después de quince minutos quería casarme con ella. Y después de media hora había abandonado completamente la idea de robarle la cartera.

65. Más que en ningún otro momento de la historia, la humanidad se halla en una encrucijada. Un camino conduce a la desesperación absoluta. El otro, a la extinción total. Quiera dios que tengamos la sabiduría de elegir correctamente.

66. Prefiero que me incineren a que me sepulten y ambas cosas a un fin de semana con mi mujer.

67. Es difícil de creer que no hayas hecho el amor en 200 años.–204 si tienes en cuenta mi matrimonio.

68. Estaba en el salón, he oído que te ahogabas, he acabado mi té con pudding y he venido en seguida.

69. Una película de éxito es aquella que consigue llevar a cabo una idea original.

70. ¡Claustrofobia y un cadáver, el colmo de un neurótico!

71. El ochenta por ciento del éxito consiste en estar allí.

72. Nunca había visto a una violinista de música clásica tan atractiva. Normalmente son todas refugiadas húngaras.

73. Usas el sexo para expresar cualquier emoción menos el amor.

74. ¿Existe el Infierno? ¿Existe Dios? ¿Resucitaremos después de la muerte? Ah, no olvidemos lo más importante: ¿Habrá mujeres allí?

75. El sexo es lo más divertido que se puede hacer sin reír.

76. En realidad, prefiero la ciencia a la religión. Si me dan a escoger entre Dios y el aire acondicionado, me quedo con el aire.

77. Lo de mi ex marido y yo fue amor a primera vista. Debí echarle otro vistazo.

78. Lo mejor que te pueden decir en la vida no es ‘Te quiero’ sino ‘Es benigno.

79. Una relación es como un tiburón; tiene que estar continuamente avanzando o se muere. Y me parece que lo que aquí tenemos es un tiburón muerto.

80. Nos enamoramos. Bueno, yo me enamoré, ella simplemente estaba allí.

81. Tuve la culpa parcialmente de que nos divorciáramos… tenía tendencia a colocar a mi mujer sobre un pedestal.

82. De acuerdo con los astrónomos modernos, el espacio es finito. Es un pensamiento muy reconfortante, particularmente para aquellos que nunca pueden recordar donde dejaron las cosas.

83. La curiosidad es lo que nos mata. No es la capa de ozono, son nuestros corazones y nuestras mentes los que nos hacen daño.

84. Hay relaciones en las que nuestras palabras dicen amistad,  mientras que nuestros ojos gritan romance.

85. El amor entre dos mujeres es mi opción favorita.

86. Eres un pesimista. Siempre ves el vaso medio vacío. No, siempre lo veo medio lleno, pero es de veneno.

87. Me interesa el futuro porque es el sitio donde voy a pasar el resto de mi vida.

88. Si quieres hacer reír a Dios, háblale de tus planes.

89. La vida está llena de miseria, soledad y sufrimiento, y todo es demasiado pronto.

90. Guarda algo de locura para la menopausia.

91. Tengo muy malos reflejos. Una vez fui atropellado por un coche que estaba siendo empujado por dos chicos.

92. Aquéllos que no pueden hacer, enseñan, y aquéllos que no pueden enseñar, enseñan gimnasia.

93. Estaba con náuseas y con hormigueo por todo el cuerpo. Estaba enamorado o tenía viruela.

94. Unos se casan por la Iglesia; otros, por idiotas.

95. Hay dos tipos de personas en este mundo, las buenas y las malas. Las buenas duermen mejor, pero las malas parecen disfrutar mucho más las horas en que están despiertas.

96. Harvard también comete errores ¿sabías? Kissinger enseñó allí.

97. No me casé con la primera chica de la que me enamoré porque había un conflicto religioso entre nosotros. Ella era atea y yo era agnóstico.

98. Sobre la bisexualidad: inmediatamente dobla tus oportunidades para una cita el sábado por la noche.

99. El trabajo del artista no es sucumbir a la desesperación, sino encontrar un antídoto para el vacío de la existencia.

100. El matrimonio es la muerte de la esperanza.

101. Al principio, no había nada y Dios dijo “hágase la luz” y hubo luz. Y seguía sin haber más nada, pero se podía ver mejor.

102. La eternidad se hace larga, sobre todo al final.

103. Las cosas no se dicen, se hacen, porque al hacerlas se dicen solas.

104. Tuve una educación terrible, asistí a una escuela de maestras con problemas emocionales.

105. No me aceptaron en el ejército, fui declarado inutilísimo. En caso de guerra sólo podría ser prisionero.

106. Somos la suma total de nuestras elecciones.

107. Soy un gran amante porque practico mucho por mi cuenta.

108. Lo que más odio es que me pidan perdón antes de pisarme.

109. Los intelectuales son como la mafia; solo se matan entre ellos.

110. No soy antisocial. Solo no soy social.

111. Creo que hay algo ahí fuera vigilándonos. Desafortunadamente creo que es el gobierno.

112. La gente tiene miedo de enfrentarse al hecho de que gran parte de la vida depende de la suerte. Da miedo pensar que hay tantas cosas fuera de nuestro control.

113. ¿Qué pasaría si nada existiese y estuviesemos todos en el sueño de alguien?

114. Mis películas son una terapia para mi depresión. En los institutos psiquiátricos las personas tejen cestas. Yo hago películas.

115. Amo la naturaleza, solo no quiero tener nada de ella sobre mí.

116. Déjame contarte una historia interesante sobre los anticonceptivos orales. Le pregunté a una chica si quería dormir conmigo y dijo “No”.

117. Morir es una de las cosas que se puede hacer con tanta facilidad como acostarse.

118. No como ostras. Quiero que mi comida esté muerta. No enferma, no herida. Muerta.

119. Creo que ser gracioso no es la primera opción de nadie.

120. Me llamaron loco. Pero fui yo, sí yo, quien descubrió el vínculo entre la masturbación excesiva y la afición a la política.

121. La mayor parte del tiempo no lo paso bien. El resto del tiempo no lo paso nada bien.

122. El crimen merece la pena. Tienes buenos horarios, conoces gente interesante y viajas a menudo.

123. Lo único que se interpone entre mí y la grandeza soy yo.

124. El sexo sin amor es una experiencia vacía. Pero como experiencia vacía es una de las mejores.

125. Si mis películas no dan beneficios, sé que estoy haciendo algo bueno.

126. En Estados Unidos no se acuerdan de la guerra con España de 1898. Lo más viejo allí tiene diez años.

127. La habilidad de ser feliz es apreciar y gustarte lo que tienes, en vez de lo que no tienes.

128. Cuando escucho a Wagner durante más de media hora me entran ganas de invadir Polonia.

129. El cerebro es mi segundo órgano en importancia.

130. En mi próxima vida, quiero vivir mi vida al revés. Empiezas por tu muerte y te sacas eso del medio. Luego te despiertas en una casa para ancianos y te sientes mejor cada día hasta que te echan porque estás muy saludable.

131. Si Jesús regresa y ve todo lo que se ha hecho en su nombre, no dejaría de vomitar.

132. El cotilleo es la nueva pornografía.

133. Estoy agradecido por la risa, excepto cuando la leche sale por mi nariz.

134. No sé beber…Mi cuerpo no tolera el alcohol. Me bebí dos martinis en fin de año e intenté secuestrar un ascensor y llevarlo a Cuba.

135. Como comediante, si logro que alguien colocado se ría no cuenta, porque esos se ríen todo el tiempo.

136. No sé lo suficiente para ser incompetente.

137. Donde no hay lógica no hay pensamiento racional. Y donde no hay pensamiento racional puede haber mucho romance, pero mucho sufrimiento.

138. No sirvo para la vida, sólo valgo para el arte y para divertir a la gente.

139. El trabajo es una invasión de nuestra privacidad.

140. No quiero casarme, sólo quiero divorciarme.

141. ¿Sabes cuál es mi filosofía? Que es importante pasarlo bien, pero también hay que sufrir un poco, porque, de lo contrario, no captas el sentido de la vida.

142. Puedes conseguir vivir hasta los cien si renuncias a todas esas cosas que te hacen querer vivir hasta los cien.

143. Nunca le dispares al aire si estás debajo de él.

144. Nunca he sido un intelectual aunque lo parezco.

145. La gente quiere una vida ficticia y los personajes ficticios una vida real.

146. Admito que fui un tonto con suerte. Si no hubiera nacido en Brooklyn y lo hubiera hecho en Polonia o Berlín, hoy sería una lámpara

147. Sé que no merezco el Príncipe de Asturias, pero tampoco la diabetes que padezco.

148. La vocación del político de carrera es hacer de cada solución un problema.

149. La vida no imita el arte, imita a la televisión basura.

150. Hay millones de libros sobre distintas materias escritos por grandes mentes y, al final, ninguno de ellos sabe más que yo de las grandes cuestiones de la vida.

151. No sé lo que quiero, pero sé lo que no quiero.

152. Es maravilloso ser capaz de crear tu propio mundo cuando quieras.

153. En mi casa soy el jefe, mi esposa es simplemente la que toma las decisiones.

154. Lo único que lamento en la vida es que no soy otra persona.

155. No creo que les gustase a mis padres. Pusieron un oso de peluche vivo en mi cama.

156. Estoy muy orgulloso de mi reloj de bolsillo de oro. Mi abuelo me lo vendió en su lecho de muerte.

157. Todo lo que tengo en la vida es mi imaginación.

158. Cuando fui enviado al campamento de verano multireligioso, fui brutalmente golpeado por niños de todas las religiones y razas.

159. Si la gente tuviese más sentido del humor el mundo sería diferente.

160. Si mi película hace a más de una persona miserable, entonces he logrado mi trabajo.

161. Hay peores cosas en la vida que la muerte: ¿Alguna vez has pasado la noche con un agente de seguros?

162. Todas las personas saben la misma verdad. Nuestras vidas consisten en cómo decidimos cambiarla.

163. Si Dios existe, espero que tenga una buena excusa.

164. No pienses en la muerte como el final, piensa en ella como una efectiva forma de cortar tus gastos.

165. La vida se divide en lo horrible y lo miserable.

166. ¿Por qué el hombre mata? Mata por comida. Y no sólo la comida: con frecuencia debe haber una bebida.

167. El crimen organizado en América genera más de cuarenta mil millones de dólares al año y gasta muy poco en suministros de oficina.

168. En la vida hay cosas horribles y miserables. Las horribles son los casos terminales, los ciegos, los tullidos, no sé cómo lo hacen. Es sorprendente. Y los miserables son todos los demás. Deberías agradecer por ser miserable. Eres afortunado.

169. Eso me recuerda un chiste: un hombre entra a la oficina de un psiquiatra y dice “Doctor, mi hermano está loco, cree que es una gallina”. Y el doctor le dice “¿Por qué no lo traes?”. “Lo haría, pero necesito los huevos”.


170. Pararte en un garaje no te hace un automóvil, así como pararte en una iglesia no te hace cristiano.

171. ¿Cómo puedo creer en Dios si la semana pasada mi lengua se quedó atorada en el rollo de una máquina de escribir?

172. Leo en defensa propia.

173. El corazón es un músculo muy resistente. De verdad lo es.

174. Siempre intentas que las cosas te salgan perfectas en el arte porque es muy difícil lograr que lo sean en la vida real.

175. Maugham dio el consejo más grande que se le puede dar a un autor joven. Al final de una oración interrogativa, coloca el signo de interrogación. Te sorprenderá lo efectivo que puede ser.

176. Criado por dos madres, vaya, la mayoría de nosotros sobrevive a duras penas.

177. ¿Por qué no? La vida es corta, la vida es aburrida, la vida está llena de dolor, y existe la posibilidad de que haya algo especial al final.

178. Estaba caminando por el bosque pensando en Cristo. Si él era un carpintero, me pregunto cuánto habría cobrado por una biblioteca.

179. Mientras esperamos por el taxi, te daré una lección. No escuches lo que tus profesores te dicen. No les prestes atención. Sólo mira cómo lucen y así sabrás cómo será la vida de verdad.

180. Cualquier cosa que valga la pena saber no puede ser comprendida por la mente humana.

181. Siempre me ha interesado que el cordero duerma con el león. Sin embargo, el cordero no dormirá mucho.

182. Es imposible viajar más rápido que la luz y no es deseable porque el sombrero de uno se cae constantemente.

183. Al principio, no había nada y Dios dijo “hágase la luz” y hubo luz. Y seguía sin haber más nada, pero se podía ver mejor.


Más frases tomadas de las películas:
1.
¿Sabes cuál es mi filosofía? Que es importante pasarlo bien, pero también hay que sufrir un poco, porque, de lo contrario, no captas el sentido de la vida.
Broadway Danny Rose, 1984

2.
(Hablando de lo limpias que están las calles en Los Ángeles) : “Aquí guardan la basura y la convierten en programas de televisión”.
Annie Hall, 1977

3.
Todos los hombres son mortales. Sócrates era mortal. Por lo tanto, todos los hombres son Sócrates. Lo que significa que todos los hombres son homosexuales.
La última noche de Boris Grushenko, 1975

4.
Nos enamoramos. Bueno, yo me enamoré, ella simplemente estaba allí.
Bananas, 1971

5.
–Se dedicaba a las apuestas, era usurero, extorsionador…
–Así que un hombre de negocios.
Broadway Danny Rose, 1984



6.
Le quiero como a un hermano: como Caín a Abel.
Delitos y faltas, 1989

7.
La gente quiere una vida ficticia y los personajes ficticios una vida real.
La rosa púrpura del Cairo, 1985

8.
No es malo que tu padre y yo discrepemos, la democracia es eso. Él defiende el ala derecha del partido republicano y yo creo que hay que estar loco de remate para hacerlo, pero…
Midnight in Paris, 2011

9.
Para ti, soy ateo. Para Dios, la fiel oposición.
Recuerdos, 1980

10.
Sentirse culpable es importante. Yo me siento culpable todo el tiempo y nunca he hecho nada.
Broadway Danny Rose, 1984.

11.
¡Claustrofobia y un cadáver, el colmo de un neurótico!
Misterioso asesinato en Manhattan, 1993

12.
Su transformación en rabino es tan real, que algunos sectores sugieren enviarlo a la isla del Diablo.
Zelig, 1983

13.
La gente debería aparearse para siempre como los pingüinos o como los católicos.
Manhattan, 1979

14.
Hay un viejo chiste: dos mujeres mayores están en un hotel de alta montaña y una comenta, "¡Vaya, aquí la comida es realmente terrible!", y contesta la otra: "¡Y además las raciones son muy pequeñas!". Pues básicamente así es como me parece la vida, llena de soledad, histeria, sufrimiento, tristeza y, sin embargo, se acaba demasiado deprisa.
Annie Hall, 1977



15.
Es un chico estupendo y un magnífico doctor. Nunca perdió un paciente. Dejó preñadas a dos de ellas, pero nunca perdió ninguno.
La comedia sexual de una noche de verano, 1982

16.
Lo de mi exmarido y yo fue amor a primera vista. Debí echarle otro vistazo.
Delitos y faltas, 1989

17.
Primero se convierte en un asesino y ahora se hace cristiano. No sé qué es peor. ¿Qué he hecho yo para merecer un hijo así?
Café Society, 2016

18.
Está en Nueva York filmando la adaptación de la secuela de un remake.
Celebrity, 1998

19.
Sólo el arte es controlable. El arte y la masturbación. Dos campos en los que soy un experto.
Recuerdos, 1980

20.
No quiero mudarme a una ciudad cuya única ventaja cultural es poder girar a la derecha con el semáforo en rojo.
Annie Hall, 1977

21.
–No sé, quizá un exceso de masturbación por tu parte.
–Oye, ¡no te metas con mis aficiones!
Hannah y sus hermanas, 1986

22.
La cuestión es: ¿he aprendido algo sobre la vida? Sólo esto: los seres humanos están divididos entre mente y cuerpo. La mente abarca todas las aspiraciones nobles, como la poesía y la filosofía, pero el cuerpo se lleva toda la diversión.
La última noche de Boris Grushenko, 1975



23.
Yo sufría de incontinencia cuando era pequeño, y como solía dormir con una manta eléctrica, estaba continuamente electrocutándome.
Bananas, 1971

24.
Después de quince minutos quería casarme con ella. Y después de media hora había abandonado completamente la idea de robarle la cartera.
Toma el dinero y corre, 1969

25.
Usas el sexo para expresar cualquier emoción menos el amor.
Maridos y mujeres, 1992

26.
(Hablando sobre ir al cine durante el día) . Es estupendo. Es como hacerle novillos a la vida.
Delitos y faltas, 1989

27.
El sexo alivia la tensión y el amor la causa.
La comedia sexual de una noche de verano, 1982

28.
–Es difícil de creer que no hayas hecho el amor en 200 años.
–204 si tienes en cuenta mi matrimonio.
El dormilón, 1973

29.
No te metas con la masturbación. Es tener sexo con alguien a quien amo.
Annie Hall, 1977

30.
Cariño, fuiste tú la que quiso dejar de dormir conmigo. El 20 de abril hará un año. Recuerdo el día porque es el cumpleaños de Hitler.
Delitos y faltas, 1989

31.
(Después del sexo) . ¡Vaya, qué rápido! ¿Ha sido porque tenía hipo?
Días de radio, 1987

32.
Nunca había visto a una violinista de música clásica tan atractiva. Normalmente son todas refugiadas húngaras.
Recuerdos, 1980


33.
–Somos personas, sólo somos seres humanos, ¿sabes? Tú te crees Dios.
–Tengo que moldearme a la imagen de alguien.
Manhattan, 1979

34.
Vamos, confiésate una vez más. Es gratis.
Alice, 1990

35.
En mi familia nunca se ha suicidado nadie, no era una alternativa para los de clase media. Mi madre estaba demasiado ocupada en la cocina matando el sabor del pollo como para pensar en pegarse un tiro.
Recuerdos, 1980

36.
El mundo del espectáculo es una jungla, es peor que una jungla: en lugar de devorarse, dejan de llamarse por teléfono.
Delitos y faltas, 1989

37.
Tengo un caso interesante. Estoy tratando dos parejas de hermanos siameses con múltiples personalidades. Me pagan ocho personas.
Zelig, 1983

38.
Admito que fui un tonto con suerte. Si no hubiera nacido en Brooklyn y lo hubiera hecho en Polonia o Berlín, hoy sería una lámpara.
Recuerdos, 1980

39.
– Piensa que esto aportará emoción a tu vida.
– Cariño, la emoción de mi vida es comer sin tener acidez después.
Scoop, 2006

40.
Yo no sé nada de suicidios. De donde vengo, en Brooklyn, nadie se suicida. La gente es demasiado infeliz.
Delitos y faltas, 1989

41.
No quiero casarme, sólo quiero divorciarme.
La última noche de Boris Grushenko, 1975



42.
No he visto a mi psicoanalista en 200 años. Era un freudiano estricto y si le hubiese visto en todo este tiempo ahora estaría casi curado.
El dormilón, 1973

43.
–¿A dónde han ido?
–Al mundo real.
–Me pregunto cómo será estar ahí.
–No parecen muy entretenidos
La rosa púrpura del Cairo, 1985

44.
La última vez que estuve dentro de una mujer fue visitando la Estatua de la libertad.
Delitos y faltas, 1989

45.
En política, me inclino por una democracia honesta. Y también creo que el sistema americano puede funcionar.
Recuerdos, 1980

46.
Mi abuela nunca daba regalos. Estaba demasiado ocupada siendo violada por los cosacos.
Annie Hall, 1977

47.
–¿Qué se siente estando muerto durante 200 años?
–Es como pasar un fin de semana en Nueva York
El dormilón, 1973

48.
El Ku Klux Klan, para quien Zelig era un judío que se transformaba en negro e indio, vio en él una triple amenaza.
Zelig, 1983

49.
Me crie en la confesión israelita, pero al hacerme adulto me convertí al narcisismo.
Scoop, 2006

50.
–¿Cree en Dios?
–No puedo ni dar el salto de fe de creer en mi propia existencia.
Sombras y niebla, 1991

51.
Creía que las Variaciones Goldberg eran una fantasía sexual del señor y la señora Goldberg.
Recuerdos, 1980



52.
–Tienes un problema para comprometerte: no sabías si querías ser psicoanalista o escritor.
–Y me comprometí: me hice escritor y paciente.
Todos dicen I love you, 1996

53.
¿Envidia de pene? Soy uno de los pocos hombres que sufren de eso.
Annie Hall, 1977

54.
Esta es una fotografía de Norman Mailer, un gran escritor. Donó su ego a la facultad de medicina de Harvard para su estudio.
El dormilón, 1973

55.
–Es mi única carta de amor
–Es preciosa
–La mayor parte es un plagio de James Joyce. Te habrás preguntado a qué venían todas esas referencias a Dublín.
Delitos y faltas, 1989

56.
¿Quieres aportar algo a la humanidad? Cuenta chistes más graciosos.
Recuerdos, 1980

57.
–(Sobre el sexo) . ¡No puedo! ¡Es asqueroso!
–¿Cómo va a ser asqueroso? Todavía no me he quitado la ropa.
La comedia sexual de una noche de verano, 1982

58.
El cotilleo es la nueva pornografía.
Manhattan, 1979

59.
–La ciencia es un callejón sin salida intelectual
–¿Entonces en qué crees?
–En el sexo y la muerte.
El dormilón, 1973

60.
Las dos palabras más bellas de nuestro idioma no son “¡Te quiero!”, sino “¡Es benigno!".
Desmontando a Harry, 1997

61.
–Eres un inmaduro, Fielding.
–¿Inmaduro? ¿Cómo que soy inmaduro?
–Bueno, emocionalmente, sexualmente e intelectualmente.
–Bueno, pero, ¿y en el resto?
Bananas, 1971



62.
Mi psicoanalista me advirtió de tu bisexualidad, pero eras tan guapa que cambié de psicoanalista.
Manhattan, 1979

63.
–Algunas veces me pregunto cómo resistiría la tortura.
–¿Tú? ¿Estás de broma? Si la Gestapo Te quitase tu tarjeta de Bloomingdale’s se lo contarías todo.
Annie Hall, 1977

64.
–El sexo sin amor es una experiencia vacía.
–Pero como experiencia vacía es una de las mejores.
La última noche de Boris Grushenko, 1975

65.
El sexo vacío es mejor que la ausencia de sexo, ¿no?
Recuerdos, 1980

66.
–Tienen ustedes una mansión preciosa. Me recuerda a Casa de muñecas.
–¿Le gusta el teatro de Ibsen?
–No, nada de teatro. Es un burdel de lujo de Palm Beach.
Scoop, 2006

67.
El sol es malo para ti. Todo lo que nuestro padres dijeron que era bueno es malo. El sol, la leche, la carne roja, la universidad…
Annie Hall, 1977

68.
No he tenido una aventura, he tenido un breve interludio de infidelidad.
Si la cosa funciona, 2009

69.
–Una sátira incisiva siempre es mejor que la fuerza física.
–No, la fuerza física siempre es mejor contra los nazis.
Manhattan, 1979

70.
¿El cerebro? Es mi segundo órgano favorito.
El dormilón, 1973



71.
–Mis días como católica terminaron cuando cumplí 16 años.
–Mis días como católica terminaron cuando mamá encontró mi diafragma
Alice, 1990

72.
Una relación es como un tiburón, tiene que moverse hacia delante o muere. Y lo que tenemos entre manos es un tiburón muerto.
Annie Hall, 1977

73.
–Eres el mejor amante que he tenido.
–Practico un montón cuando estoy solo.
La última noche de Boris Grushenko, 1975

74.
(Sobre el sexo) Nunca me divertí tanto sin reírme.
Annie Hall, 1977

75.
No puedo escuchar tanto Wagner. Me entran ganas de invadir Polonia.
Misterioso asesinato en Manhattan, 1993

76.
El cerebro es el más sobrevalorado de los órganos.
Manhattan, 1979

77.
Como comediante, si logro que alguien colocado se ría no cuenta, porque esos se ríen todo el tiempo.
Annie Hall, 1977

78.
–Podría decirse que soy medio santa, medio puta.
–Espero poder conseguir la mitad mejor.
La última noche de Boris Grushenko, 1975

79.
Todas las prostitutas con las que hablo me dicen que es mejor que trabajar de camarera. Trabajar de camarera debe de ser el oficio más jodido del mundo.
Desmontando a Harry, 1997

80.
Tal vez los poetas tengan razón. Tal vez el amor es la respuesta.
Hannah y sus hermanas, 1986



81.
Mis padres no solían pegarme, lo hicieron sólo una vez: empezaron en febrero de 1940 y terminaron en mayo del 43.
Días de radio, 1987


TODO WOODY ALLEN EN 10 FRASES DE SUS MEMORIAS

https://www.hoyesarte.com/cine/todo-woody-allen-en-10-frases-de-sus-memorias_280643/

 

A LOS CINCO AÑOS DE EDAD TOMÉ CONCIENCIA DE LA MORTALIDAD Y PENSÉ: ah, no, yo no me apunté para esto. Hace unos años en una rueda de prensa del Festival de Cannes volvieron a preguntarle por su relación con la muerte y contestó muy serio: estoy totalmente en contra. Aquel doloroso y temprano descubrimiento de que somos finitos generó una de esas obsesiones que no le han abandonado desde entonces y que ha motivado momentos antológicos en su cine; sin ir más lejos, en Annie Hall y Hannah y sus hermanas. Felizmente no solo no ha intentado nunca quitarse la vida sino que ha llegado a la concusión de que “la sangre es más fuerte que el cerebro. No hay ningún motivo lógico para aferrarse a la vida pero ¿a quién le importa lo que dice el cerebro? El corazón dice: ¿Has visto a Lola con su minifalda?”.

 

 

A MI MADRE LA LLAMARON TANTAS VECES PARA QUE FUERA A HABLAR CON LAS MAESTRAS QUE SE CONVIRTIÓ EN UNA CARA CONOCIDA. No hay más que ver cómo ha retratado Allen a los docentes en su cine para imaginar el terrorífico recuerdo que guarda de su etapa escolar. Habla de “frígidas antisemitas” dispuestas a amargar la vida a un chaval al que le gustan con locura las chicas (“¿Qué se supone que me tenía que gustar, las tablas de multiplicar?”), que pasa de la religión que le corresponde (“el cerdo me encantaba, detestaba las barbas”) y que tiene pronto claro que le gustaría ser agente del FBI, investigador privado, apostador como su padre, mago, periodista o músico de jazz.

 

 

ANHELABA EL DÍA EN QUE PUDIERA ENTRAR EN UN BAR DE MANHATTAN Y DECIR “LO DE SIEMPRE”. Un día, el crío de Brooklyn cruza el puente y se adentra en la isla de los sueños. Surge entonces un amor que no ha remitido. Los problemas de producción le han llevado a rodar con gusto en París, Venecia, Londres o Barcelona pero si por él hubiera sido no habría dejado nunca de fotografiar el cambio de estaciones en Manhattan. Dejó el ático con vistas a Central Park no por las molestas e incesantes goteras sino para ganar metros cuadrados cuando adoptó dos niñas tras casarse con Soon-Yi. Cuenta Allen en el libro que algunas de las mejores postales que se suceden al inicio de Manhattan fueron un golpe de suerte. Son tres minutos prodigiosos a los acordes del Rhapsody in Blue de George Gershwin. “Capítulo 1. Él adoraba la ciudad de Nueva York…”.

 

 

CRECÍ EXPERIMENTANDO UNA MODERADA SENSACIÓN DE ANSIEDAD, IGUAL QUE SI TE ENTIERRAN VIVO. Los psiquiatras y psicoanalistas que tanto juego le han dado en sus películas hacen acto de presencia en sus memorias pero lo cierto es que mucho menos de lo previsto. Aunque muy querido por sus padres y afortunado de hacerse pronto un nombre como creador de gags para columnistas cuando aún era un adolescente, no pudo evitar ser siempre un tipo temeroso, necesitado de ayuda profesional médica, “alguien a quien tener cerca y con quien compartir mi sufrimiento”.

 

 

MI PRIMER INTENTO DE HACER DRAMA ESTABA INFLUIDO POR BERGMAN, MI ÍDOLO CINEMATOGRÁFICO. Puede que en su autobiografía Allen hable de medio centenar largo de artistas de los que se declara devoto: desde Bob Hope y Fred Astaire hasta los mitos del cine europeo, los Fellini, Truffaut o Bergman, a los que ha celebrado, incluso defendido, en los diálogos de sus películas. También los ha emulado sin pudor contratando a sus directores de fotografía o a sus actores fetiche. Pero eso no le hace menos único. Allen, como alguno de los citados, es mucho más que un gran cineasta, es en sí mismo todo un género cinematográfico, y de esos se cuentan con los dedos de una mano.

 

 

LAMENTO DECIRLO PERO NO TENGO LO QUE SE REQUIERE: OÍDO, TONO, RITMO, SENTIMIENTO. Nació con un talento inoxidable para escribir historias divertidas pero no para crear música, su gran pasión. El entusiasmo y el amor al jazz de Nueva Orleans le ha llevado a practicar horas infinitas de su vida con el clarinete. Su celebridad le ha permitido salir de gira con su banda a dar conciertos por toda Europa. Pero él no se engaña y cuando se compara con sus ídolos se percibe como “un jugador de fin de semana que se enfrenta a Federer y Nadal”. Por lo demás, musicalmente a Woody Allen le asociamos a lo mejor del gran cancionero americano: la banda sonora de sus películas tiene su origen en su colección de discos. Confiesa que elegir las canciones es su momento favorito de realización, “saber que así gracias a la música parecerá mejor de lo que realmente es”.

 

 

LA RISA NO ES UNA CIENCIA EXACTA. Sostiene Woody Allen que es complicado saber por qué los mismos chistes funcionan para unas personas y dejan frías a otras. Puede que ni en sus mejores momentos el director de Balas sobre Broadway resulte gracioso a todo el mundo pero, eso sí, a los que gustan de su humor les lleva proporcionando buenos ratos durante unas cuantas décadas y haciendo feliz a varias generaciones de seguidores. Su comicidad no surge de la nada; se conoce al dedillo cuanto escribió S. J. Perelman, “un ser superior al resto de mentes cómicas”, y es fan declarado de Bob Hope, Elaine May, W. C. Fields y, cómo no, Groucho Marx, del cual dice que guarda un notable parecido con su madre. Leído el libro, no hay duda de que podría volver a ganarse la vida más que bien facturando monólogos para el club de la comedia.

 

 

SÉ QUE ANTES DE FILMAR CUALQUIER COSA HAY QUE QUITAR LA TAPA DE LA LENTE DE LA CÁMARA. Pues eso: disfruta haciendo cine (“la gracia de hacer una película es hacerla”) pero sin volverse loco. “A mí me gusta rodar una escena, pasar a la siguiente, terminar y salir pitando”. No se cansa Allen de presentarse como un director muy limitado sin la energía de Scorsese, Coppola o Spielberg, como un realizador que apenas da indicaciones a los actores, como un creador sin una obra de arte al nivel de Fresas salvajes o El séptimo sello. Pura coquetería teniendo en cuenta que hablamos del tipo que, solo en la década de los ochenta, hizo cosas tan distintas y geniales como Días de radio, Zelig, La rosa púrpura del Cairo, Hannah y sus hermanas y Delitos y faltas. Ya lo sabíamos por entrevistas previas pero en el libro insiste en que no lee las críticas de cine, no vuelve a ver nunca más sus películas una vez que se estrenan y no le interesa nada recibir premios aunque hiciera una excepción con el Príncipe de Asturias de las Artes 2002. Para verle en acción como director, nada mejor que el documental de Robert B. Weide.

 

 

YO QUERÍA SUBIRME AL METRO CON BARBARA WESTLAKE, VIAJAR HASTA MANHATTAN, LLEVARLA A MI ÁTICO DE LA QUINTA AVENIDA, BEBER DRY MARTINI, SALIR A LA TERRAZA Y BESARLA A LA LUZ DE LA LUNA. Este era el plan de vida que se marcó Woody Allen siendo un mocoso cuando conoció a Barbara Westlake en el jardín de infancia. Y lo cumplió. No con Barbara pero sí con sus dos primeras esposas, la adolescente Harlene y la bella pero inestable Louise Lasser, con su adorada Diane Keaton y otras mujeres, varias de ellas también actrices (Stacey Nelkin, Jessica Harper…) y así hasta esos dos puntos de inflexión que fueron sus 12 años con Mía Farrow y, acto seguido, los cerca de 25 que lleva con su actual pareja Soon-Yi. Así que sabe por experiencia lo mejor y lo peor que traen consigo las relaciones de pareja y lo ha contado como nadie en el cine, mucho mejor que sus hipocondrias o el sinsentido de la vida. Suyos son además algunos de los momentos más románticos de la historia del cine como ese paseo que protagoniza en Manhattan con Diane Keaton y su perro salchicha y que culmina en un banco con vistas al puente de Queensboro a punto de amanecer.

 

 

NO CREO EN UN MÁS ALLÁ Y REALMENTE NO VEO QUÉ IMPORTANCIA PUEDA TENER QUE LA GENTE ME RECUERDE COMO UN CINEASTA O COMO UN PEDÓFILO. A los 84 años tiene derecho a estar de vuelta de todo pero no hay más que leer el libro y el espacio que dedica al asunto para saber que no es exactamente así. Allen tiene una familia que está y estará en contacto con medios de comunicación que han decidido meterle en el mismo saco que ocupan otros hombres que bien han sido condenados, bien han admitido haber incurrido en delitos sexuales, bien han sido acusados por muchas mujeres muchas veces. En su caso, las investigaciones realizadas siempre descartaron que abusara de su hija cuando tenía siete años. Hay en sus memorias bastantes páginas de lamento por no advertir las muchas señales que desaconsejaban iniciar una historia con Mia Farrow, extraordinaria en todo lo que rodó a las órdenes de Allen. Y aun así, con el dolor que supone haber perdido el contacto con dos de sus hijos, confiesa que no se arrepiente de la experiencia porque gracias a aquella relación encontró al amor de su vida. Lo dicho: un romántico.